Una cuestión diferencial

No son ni uno ni dos, sino ya varios, los compañeros que, en nuestras visitas a sucursales, nos han manifestado la problemática que les ocasiona los desplazamientos necesarios a sus lugares de trabajo.

Estos compañeros y compañeras, en el 90% de los casos, tienen fijados sus domicilios en localidades situadas en el extrarradio y están destinados/as en sucursales dentro de la ciudad de Madrid. El problema que se encuentran no es otro que los largos tiempos de desplazamiento hasta sus centros de trabajo debido al tráfico que soportan en horas puntas los accesos a la capital, cuando el mismo recorrido en sentido inverso en esas horas, puede llegar hasta la mitad de duración en tiempo. Ese exceso de tiempo produce en ocasiones un estado de nervios que puede incrementar el riesgo de sufrir accidentes in itinere.

Añadir a esto el perjuicio económico en gasto de combustible, entre otros posibles, que soportan estos compañeros al estar obligados a tener en marcha sus vehículos durante tales espacios prolongados de tiempo. La actualidad se impone y siguiendo las últimas indicaciones del gobierno, ahora toca ser solidario con el país y ahorrar consumo energético.

La posibilidad de utilizar transporte público no es mucho más alentadora. A la congestión habitual de estos hay que sumarle en muchos de los casos la escasa frecuencia y la obligación de enlazar varios de ellos para llegar al destino fijado. Vamos, un exhaustivo estudio de tiempos que no se lo salta ni el más ilustrado ergonometrónomo.

Somos capaces de entender que la mayor abundancia de sucursales y centros de trabajo en la capital obliga a que sus dotaciones de plantilla procedan de distintos puntos geográficos ocasionando las incomodidades y molestias a las que nos referimos, pero creemos que una gestión de personal más planificada y más empatizadora con esta problemática podría solventar a muchos algunas de estas molestias.

No tiene sentido que haya compañeros domiciliados en Madrid que prestan sus servicios en sucursales u oficinas del extrarradio y a los cuales les podría convenir estar ubicados dentro de la capital y, aquellos otros y otras, que habitando en poblaciones donde el banco tiene sucursales u oficinas, deban de venir a prestar sus servicios a la capital. Y aun así, en el caso de que las circunstancias y la demanda de trabajadores y trabajadoras en la ciudad de Madrid excedan las posibilidades de colocación de estos compañeros en sus localidades de residencia, al menos, ubicarles en aquellas zonas de Madrid más próximas, o bien por carretera o bien por transporte público, a sus domicilios.

Porque en CGT a pesar de nuestras reiteradas peticiones a este respecto, seguimos sin ver una verdadera sensibilización a la problemática de las personas ni propuestas de soluciones consensuadas para solventar ésta desde el departamento de Recursos Humanos. Como siempre, desaprovechan las oportunidades que se les presentan para tener mejor prensa entre el resto de la plantilla del Banco.

Salud.